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Matrimonios

¿Quién podría llevar a la novia hasta el altar?

Caminar al altar y entregar a la novia también tiene una fuerte simbología y representación en un matrimonio, por esta razón, hoy te contamos quiénes podrían acompañarte rumbo al atar al encuentro con el amor de tu vida.

Un Sueño de Boda

Así como los anillos de compromiso, entregar a la novia en el altar es una tradición antiquísima de gran significado y representación. Su concepción inició con la importante entrega de lo más preciado y puro que un padre poseía a un hombre que él consideraba digno de tal privilegio; de aquí el por qué un vestido de novia se escogía de color blanco por su pureza. Con el tiempo, cambió la tradición para simbolizar la aprobación al yerno que su hija lo escogió como compañero de vida, la confianza en él, buen augurio de matrimonio feliz y alegría del padre por su unión. Y en cuanto a caminar rodeada de los arreglos florales de boda hacia el altar, su principal significado describe los últimos pasos que la novia da junto a la protección de su familia para ahora formar su propio hogar. Por eso es que tradicionalmente se le da este hermoso rol al padre, pero no todas las novias se les facilita optar por esta tradición y es entonces cuando se preguntan ¿Quién puede o debería llevar a la novia hasta el altar? Aquí encontrarás otras alternativas de personas a las que puedes escoger, de acuerdo a tu caso. Alista papel y lápiz.

El abuelo

Hay abuelos que son como padres en nuestras vidas. Sus consejos y hermosas historias del pasado familiar, convirtieron tu niñez, adolescencia o vida entera en una gran historia que seguro contarás a tus hijos, y por eso el lazo filial se convirtió en un fuerte vínculo de amor irrompible. Por más discusiones o posibles desacuerdos que hayan podido tener, si sientes que tu abuelo tuvo un importante papel en tu vida, escógelo como tu compañero de entrada nupcial. Se sentirá muy feliz de que le involucres en una responsabilidad tan bella en tu boda.

Dream Stock

La madre de la novia

Y si hablamos de merecedores, una madre sí que se lleva el primer puesto. Ella, que siempre ha estado a tu lado y que sufrió los más duros y fuertes dolores para tenerte, la que los siguió sintiendo mientras te veía crecer y quiso darte lo mejor o que no pasaras por las mismas necesidades que ella. Esa mujer definitivamente debe ser quien te acompañe en el recorrido. Cuando llegue el momento de ajustar los detalles del peinado elegante, ocasionados por levantar el velo para descubrirte frente a tu futuro esposo y te entregue tomando las manos de ambos, recordándoles lo feliz que se siente de verlos casándose; verás que fue la mejor decisión al elegirla, sus lágrimas serán un reflejo de su gratitud.

El hermano

Hay hermanos que se convirtieron en grandes amigos de la vida. Cómplices de aventuras, los mejores críticos constructivos hasta de un simple peinado semirrecogido y tus preferidos para pelear sin razón o por capricho. Un hermano puede convertirse en una persona muy importante, hasta llegar a asumir el papel de padre que no estuvo para guiar al crecer, dando excelentes consejos y regañando cuando debía para enderezar un poco el camino. Esos amigos de sangre, padres sustitutos o “compinches” que llamamos hermanos, seguro es la persona ideal para llevarte al altar. Y si tienes más de uno, puedes hacer una entrada bien acompañada con todos ellos, repartiéndolos por tramos en el camino o entrando de la mano de ambos.

Natalia Salgado Bodas y Eventos

El padrino de la novia

Todos los bautizados por la iglesia tenemos un padrino, quien aceptó asumir el papel de padre en el caso que éste llegase a faltar. Y hay padrinos que de verdad se tomaron ese papel con amor y completa responsabilidad, necesitaras o no esa figura paterna. Siempre sentiste su apoyo incondicional. Por ello, si alternativas quieres para caminar al altar, el padrino de la novia está también en la lista de compañeros idóneos. Puede que no te conozca tanto como las personas que vivieron bajo el mismo techo que tú, pero si tuvieron una relación tan cercana como para que lo tengas en cuenta, seguramente sus frases de amor cortas en el discurso de entrega de la novia, de las lecturas en la ceremonia o del brindis, estarán llenas de sentimiento y tu prometido sabrá que su aprobación es importante para ti.

El padrastro

En los casos en que tengas un padrastro que quieras demasiado y la relación creada con él se haya fortalecido tanto que lo tengas en la mira como para acompañarte en el altar, puede que sea la mejor opción para ti. Lo cierto es que son pocos los casos en que la madre de la novia cede ese turno para dárselo al compañero que las cuidó cuando lo necesitaron, pero hay ocasiones que en verdad se convierte en padres del hogar. Tal vez no para reemplazar la falta de tu padre ni para sustituirlo; solo porque creo una relación tan estrecha con el universo de tu madre que ahora se siente parte de ella. Así que, si es tu caso y la relación con tu padrastro es muy fuerte, aquí está tu respuesta.

Junto a los “chiquis”

La entrada de la novia precedida por los pajecitos, es la tradicional manera de, además de llevar las argollas de matrimonio en oro al altar, anunciar la llegada de la novia a la iglesia. Sin embargo, una linda alternativa es pedirle a los ‘chiquis’ que te lleven de la mano, caminando juntos hasta el altar. Sean tus hijos, los de tu futuro esposo, los ahijados o sobrinos preferidos, la ternura que desprenden los niños se reflejará en el momento en que camines con ellos y su linda energía, te liberará de cualquier tensión o estrés acumulado en la preboda.

Elizabeth Carvajal & Alejo Mejía

Un primo que quieres como hermano

Así como hay amigos que llamamos hermanos, hay hermanos que llamamos primos. Como crecieron juntos, esa contemporaneidad los hizo crear una relación muy fuerte y cercana, llena de confianza y de amistad sincera. Sabes que definitivamente debieron haber sido hermanos porque llamarlos primos se queda corto para el tipo de vínculo que forjaron. Así que, si además de mandarle una tarjeta de matrimonio moderna invitándole a ser parte de los asistentes de tu gran día, invítale a ser parte de la corte nupcial, caminando contigo hasta al altar.

La amiga de toda la vida

Siguiendo con los fuertes vínculos creados con personas que aparecen en tu vida de forma inesperada, encontramos los amigos. Pero no cualquier amigo, son esos a los que puedes llamarlos como quieras o ponerle el sobrenombre que se te ocurra, enojarse, discutir y dejarse de hablar por un tiempo, pero es muy difícil alejarse de ellos. Seguramente sean escasos, y la razón es que es muy difícil encontrar gente así en la vida. Si tienes un amigo o amiga, tan cercana y longeva como si fuera de la familia, puedes tenerla en cuenta para esta decisión. Será otra de sus anécdotas de vida que seguro contarán cuando sean viejitas y sigan hablando de su linda amistad.

Juan David  & Laura

Y para esas novias independientes, puedes optar por caminar sola al altar. A veces elijes una argolla de matrimonio o escoges un hermoso velo de complemento para tu peinado de novia, sin pensar en su connotación, tradiciones y simbolismos. Solo porque te gusta o quieres que sea parte de la ceremonia de tu unión matrimonial con el hombre que amas, sin darle tanta importancia a las representaciones sociales del acto de casarte. Así que, si te gusta la idea, camina sola al altar sin pensar en lo que hagan otras novias y con la misma confianza y seguridad que todas ellas.