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Matrimonios

¿Qué tal unos cupcakes para la mesa de dulces?

Vistosos, alegres y ponen una nota divertida a la porción dulce del banquete. Si están buscando una opción diferente, llena de color y darle diversidad a los sabores de su celebración, no duden en incluir estos postrecitos.

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D'Clau

Tanto por el tamaño como por las alternativas para personalizarlos y la variedad de sabores que les ofrecen, los cupcakes se han convertido en una de las opciones más apetecidas como postre de bodas. Son una opción que fácilmente combina con su decoración para matrimonio pues el pastillaje puede teñirse de múltiples colores conservando su delicioso sabor, además, es posible incluir elementos atractivos y muy suyos como figuras con el vestido de novia y traje de novio, adornarlo con sus flores favoritas en azúcar, escribir con chocolate algunas frases de amor o tener miniaturas de su ponqué de bodas.

Los cupcakes funcionan muy bien en la mesa de dulces dándole un atractivo de color vistoso y muy provocativo, pero también son una excelente opción para reemplazar la torta de matrimonio o como recordatorio para los invitados. Exploren las alternativas ofrecidas por estos ponquecitos, den a su celebración un aire menos acartonado y lleno de sabor.

Como protagonista del brindis o cerrando el banquete

Como ya les mencionamos los cupcakes funcionan muy bien para varios momentos de la celebración. Pueden reemplazar el pastel, que comúnmente hace parte del brindis y su fotografía con las manos de ambos cortándolo y exhibiendo sus argollas de matrimonio, llenando el momento de originalidad. Pueden tener las dos opciones, un pastel más pequeño para seguir la tradición y cupcakes para repartir a los invitados.

Si quieren seguir una inspiración clásica prefieran el pastillaje de masmelo blanco, decorado con perlas doradas o plateadas, diseños de flores de azúcar como rosas y hojas o cintas de caramelo dorado. Pueden también elegir tonalidades de pastel verde, rosada o tonos nacarados si se tratará de una ceremonia con decoración vintage de boda, o preferirlos sin cobertura o naked, con algunas frutas encima o un pequeño adorno de crema batida si su fiesta es definitivamente relajada y casual.

Ubíquenlos en forma de pirámide sobre una base metálica, de acrílico transparente o de madera, para obtener el mismo efecto de una torta de varios niveles. Como opción en la mesa de dulces, pueden ponerlas en platos de diversos tamaños o en canastas.

Muchos no son tantos

Por su tamaño los cupcakes son la porción perfecta de dulce y les permite experimentar con diversos sabores. Tanto los tradicionales de bizcocho envinado o vainilla tienen cabida al lado de gustos más modernos como chocolate, textura tipo brownie, red velvet, naranja, limón o la fruta de su preferencia.

Pueden probar recetas con el centro blando, relleno de crema, chips de chocolate o mermelada. Con la cobertura también pueden jugar entre cremosas tipo chantilly o crema batida de colores, chocolate o amarmolados que les permitan personalizar sus ponquecitos.

De todo su gusto

Personalizarlos es muy sencillo por lo que pueden dar rienda suelta a su creatividad y adornarlos con figuras que van desde las mismas flores que usaron en sus centros de mesa para boda hasta formas que den cuenta del espíritu de su celebración como notas musicales, motocicletas, sombreros, alusiones a sus atuendos nupciales.

Pueden preferir una cobertura negra y dibujar con crema formas tipo encaje si quieren conservar un estilo sobrio, poner sus fotografías impresas sobre pastillaje para compartirlo como recuerdo de boda, atreverse con colores brillantes o añadir todo aquello que vaya en línea con su temática de matrimonio.

Para toda ocasión

Tanto si van a celebrar en un salón de fiestas o si el suyo es un matrimonio campestre, los cupcakes pueden tener un lugar protagónico y llamativo. Si eligieron el salón, estos pueden ir en pirámide al lado de las copas del brindis en el lugar del pastel.

Para matrimonios al aire libre, ubíquenlos en la mesa de dulces, sobre rodajas de madera o cestas de mimbre y si es de aire más shabby chic, en bandejas de porcelana o sobre carpetas de papel de las usadas para repostería.

Los cupcakes son deliciosos y ponen una nota juguetona y original en su matrimonio. Pueden ofrecerlos en colores que hagan juego con los vestidos de fiesta de las damas de honor o decorarlos con figuras que dibujen el lugar de su luna de miel. No lo duden: son un acierto que degustarán todos los asistentes hasta chuparse los dedos.

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