Muy buen el servicio, un lugar definitivamente bello y romántico para un matrimonio, mucho cumplimento, hace tus sueños realidad. El servicio es completo, elegancia y profesionalismo.
Se lo recomiendo.

Me pareció un lugar mágico. Cumplió cada una de mis expectativas. Me quiero volver a casar. La comida exquisita y la organización excelente, de verdad los recomiendo y piensan también en los pequeños en cuanto a la comida. La decoración fue mágica, yo personal escogí el rojo y todos los centros de mesa llevaban enormes ramos de rosas rojas. Eso me encantó porque era lo que anhelaba y muy pendientes de mis necesidades. Siempre tenían un si, para lo que quería en ese día tan mágico y mi esposo estaba muy contento con todo. Esta es mi opinión basada en lo que viví el 7 de abril de este año y simplemente todo se resume a que fue algo mágico.

Excelente decoración acogedor el sitio muy bueno todo, muy puntuales el plato super delicioso. un ambiente muy confortable, familiar limpio organizado. los meseros excelente, aseado puntual la decoración espectacular.

Excelente, quedamos super felices con la atención, la logística, el espacio, la decoración muy linda, super recomendado. Hicieron todo, no tienes que preocuparte por los preparativos para la ceremonia, la comida, muy atentos a las necesidades.

Comenzaré contándoles que mi deseo como toda mujer es casarse con el hombre de sus sueños en una boda de ensueño. Ahora describiré mi matrimonio, me casé un sábado en horas de la mañana, porque quería que fuera diferentes a la mayoría de matrimonios que se celebran en la noche. Como tenia tan poquito tiempo para el arreglo de uñas y cabello tuve que hacerlo un día antes y quedarme una noche entera durmiendo con los chumis y me acoste súper tarde, al otro día en la mañana me hicieron un baño de luna y luego de desayunar empezamos el proceso de peinarnos, maquillarnos y todo eso todas las mujeres de la casa y casi se nos hace tarde. Salimos de la casa y la verdad tenia nervios de empezar una nueva vida y me entró la nostalgia y por eso me pasé del lugar donde era la boda, por esa razón tuve otros 10 minutos de retraso en el tiempo. Cuando entré con la marcha nupcial, tenia muchos sentimientos juntos, miedo, nervios y alegría, miré la decoración y me encantó, miré al novio y estaba súper lindo también, se hizo la entrega y el pastor empezó la ceremonia y nos casamos, todas las personas nos empezaron a abrazar y a felicitar, nos tomamos muchas fotos, brindamos, comimos una comida muy rica. Y toda esta alegría gracias a Dios, aunque no fue fácil llegar a ese momentos por varios motivos, entre ellos que muchas personas estaban en contra de nuestro matrimonio, el tiempo y el presupuesto, pero eso a Dios no le queda grande así que para que me entiendan, él solo compro los anillos y otros gastos pequeños, todo lo demás nos lo regalo Dios por medio de varias personas y la noche de bodas fue un regalo del hotel 5 estrellas donde trabaja, por eso para Él toda la gloria.