El matrimonio de Pedro y Andrea en El Rosal, Cundinamarca

La crónica de nuestro matrimonio

Fue un día donde todo lo que pasó lo hizo perfecto. De comienzo a fin.Nos casamos en Casa Aragón y fue una de las mejores decisiones que pudimos haber tomado, porque aunque la mañana de la boda todo estaba cómo lo imaginamos, el clima nos empezó a sabotear, la lluvia estaba amenazando todo y todo el equipo de organización estuvo cuidando que todo se mantuviese perfecto. Esperamos una media hora para poder realizar la ceremonia y fue perfecto, porque durante ese tiempo no cayó ni una gota de lluvia, todos reimos y lloramos con la ceremonía con un sol precioso y el lago de fondo. Al caer el sol, nos llovió y todo se cambió de sitio... Pero como dije al principio todo pasó para mejor. Tuvimos la cena junto a la chimenea, la cena, los brindis todo perfecto y dio el tiempo suficiente para que el clima mejorara y pudieramos disfrutar de la mejor fiesta en la terraza, bajo las luces, con el bar y la mejor música. Fue una fiesta mágica, emotiva y muy acogedora. Todo lo que queríamos y más.