El matrimonio de Wilman y Marcela en Cali, Valle del Cauca

La crónica de nuestro matrimonio

Fue una mañana soleada, hermosa. Llegamos a la iglesia todos reunidos acompañados de familiares, amigos y de todas las personas que nos quieren y aprecian durante la misa, que fue oficiada por un sacerdote conocido. Mi familia fue lindísima y con buen significado para cada uno de los dos.

Ya en la recepción muy lindo, y el espacio que daba un lugar mágico de ambiente campestre pudimos disfrutar todos los allí presente como todo, por más que uno quiera que todo salga de mil maravillas siempre hay algo que lo estropea, y fue por parte de proveedor de banquete y protocolo "Bodas, Fiestas, Eventos y Banquetes Cali". Esta empresa que contraté, cabe añadir que con tantas cosas se me olvidó firmar el contrato de prestación de servicio, pero como soy una mujer de palabra y de mucha responsabilidad cancelé todo antes del evento como es lo acordado. Pues confié en el recorrido y la palabra de la señora y que me llevo la sorpresa que durante el evento solo va vi durante la misa, acomodando todo a las carreras y no con el orden que solicité. Ya en la recepción, pues la señora llegó y volvió, salió y dejó la información. Salió a recoger algo a la iglesia, “que ya volvía" pero nunca llegó a dirigir y coordinar mi evento. Dejó a cargo a unos de los meseros para que estuvieran al pendiente. Hago la pregunta: un mesero debe ser el encargado para dirigir un protocolo de una recepción como brindis, rifa del ramo, liga y demás, ¿siendo menores de una boda? Yo creo que no, no sé si yo soy la poco modernizada que no sabía que actualmente era así.