El matrimonio de Juan Guillermo y María Paula en Cali, Valle del Cauca

El día para mí (María Paula -la novia-) inició a las 8 am, tuve cita en la peluquería de Juan Antonio Taborda "Peluche" a las 9:30 am y fui con mi hermanita, mi mami y mi abuelita. Nos dejaron listas a la 1 pm y por cierto quedamos divinas.

Acto seguido, y como empezó a hacer solecito, hicimos una sesión de vídeo con Cristian Bustos y fotos con Jhon Fernández, en el gato de Tejada y luego nos fuimos a la iglesia. Creo que llegué un poco temprano así que nos tocó esperar con los pajecitos afuera. Ya empezaba a hacer más calor por los nervios y todo.

Muy a las 3pm, al entrar a la iglesia, ahí estaba Juan, divino como siempre, esperándome con su gran sonrisa que lo caracteriza, los dos solo nos veíamos y sonreíamos, no ensayamos el protocolo de la iglesia así que hicimos unas vueltas chistosísimas e iniciamos la ceremonia en la iglesia el templete (que por cierto, estuvo muy linda también).

Bueno, al salir de la ceremonia, todos nos echaron pétalos de rosas blancas hasta que salimos de la Iglesia y luego en la salida estaban todos los invitados esperándonos con globos de helio de color blanco y morado para lanzarlos al aire. La gente estaba muy emocionada también.

Los saludos con los invitados fueron rápidos para alcanzar a llegar al sitio del evento (Casa de eventos Piedragrande) que queda a las salida de Cali detrás del autocine en la vía Cali-Jamundí. Salimos de ahí con una sonrisa de oreja a oreja.

Eran las 5pm cuando llegamos al sitio y nos quedamos con la boca abierta. ¡Todo estaba hermoso! (ojo y no solo lo digo yo como novia, mi esposo estaba también muy feliz con todo: la decoración, el sitio, el recibimiento a los invitados) e iniciamos nuestra famosa sesión de fotos. íbamos esquina por esquina del sitio y debo admitir que es un tris agotador (y eso que yo amo y adoro las fotos). casi al punto en que ya no quería sino sentarme a tomar agua por montones y mi esposo se reía mucho y me animaba para continuar.

La fiesta inició pronto, el animador que contratamos se encargó de todo con el Dj y la gente empezó a comer postres como locos, hicimos el baile de los novios de apertura y luego la cena.

La gente lo único que hizo en toda la fiesta fue felicitarnos, todos estuvieron felices y como procuramos invitar a todos con su respectiva pareja parecía que el amor se les revivía a todos, es en serio cuando todos dicen que fue una boda soñada de cuento de hadas. Juan y yo nos disfrutamos hasta el último detalle de la fiesta y a cada invitado en la medida de lo posible.

Gracias a Dios todo terminó en perfectas condiciones como a la 1am, todos salieron felices, un poco entonados, pero ningún borracho ni mucho menos hubieron incidentes.

Eso sí les cuento, de la fiesta uno termina muerto, molido como quieran llamarlo, pero feliz, con una sonrisa y un recuerdo para toda la vida, que de ser posible lo volveríamos a repetir.

Gracias a todas las personas que colaboraron en la realización de ese evento que fue solo una celebración de la gran noticia de iniciar a compartir nuestra vida juntos y obvio gracias a los invitados, que se gozaron con nosotros esa fiesta.