El matrimonio de Diego y Andrea en Bogotá, Bogotá DC

La crónica de nuestro matrimonio

Sin duda alguna es un día emocionante, porque realmente sientes que es el más importante, el tan anhelado, porque has estado tanto tiempo organizando y cansando a las personas de tu alrededor porque no hablas de nada más.

Lo más lindo es pasar este proceso con tu familia y las personas que amas.

Nuestra boda fue campestre, nos llovió y donde planeábamos hacer la ceremonia estaba vuelto un charco y nos tocó cambiar de plan, me pego siempre duro, porque tenía un ideal de organización y todo cambió, pero bueno, dentro de mí me decía "disfruta este día, lo recordarás por siempre" y yo sabía que algunos detalles se iban a salir de manos y es ahí donde las novias debemos descansar y disfrutar.

Estaba súper relajada ese día, el maquillaje, la puesta de vestido, fotos iniciales. Pero cuando ya voy entrando de gancho con mi papá pensé en todo, en que ya no estaría viviendo con mis padres que amo tanto, que mi vida cambiaria, que el día esperado, luchado y guardado había llegado y comencé a llorar (en fotos lo verán).